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¡Hay equipo!

Secuencia didáctica y Recursoteca para 6to. y 7mo. grado de primaria
y 1ro. y 2do. año de secundaria

Introducción

 

En los grados superiores, al encarar nuestra planificación sobre Iamim Noraim, nos encontramos con varios “¿y ahora qué?”. ¿Qué les puedo enseñar a mis alumnos que no hayan visto antes?, ¿cómo mencionar Rosh Hashaná sin escuchar un “¡otra vez...!”?, ¿cómo acercarlos a las tefilot ahora que ya están más grandes y pueden comprender su sentido?

Tomemos esta última pregunta como ejemplo para analizar un contenido que puede resultar desafiante para trabajar con los chicos: las tefilot.

 

Una de las tefilot centrales de Iamim Noraim  es Unetané tokef. Esta tefilá refleja lo complejo de algunos aspectos que la tradición nos sugiere transmitir en estos días de introspección. Su historia y su contenido deben ser matizados para que puedan ser comprendidos y resultar significativos para los chicos, e incluso también, para un público adulto no tradicionalista.

A pesar de los duros presagios que se vaticinan para quienes no tengan una conducta ética hacia su prójimo, la tefilá contiene una enorme sensibilidad. Al finalizar, simplemente, nos da la clave para comenzar renovados en el año que comienza:

“Pero el arrepentimiento,

el rezo y la solidaridad
atenúan la severidad del juicio”.

 

De la tefilá Unetané Tokef

“Uteshuvá, utefilá, utzedaká

Maavirin et roa hagzerá”

 

Min hatefilá Unetané Tokef

ותשובה, ותפילה, וצדקה"

."מעבירין את רוע הגזירה

 

 

מן התפילה ונתנה תוקף

 

 

Estos tres conceptos aluden a tres dimensiones en las que un individuo crece como persona: la que implica mirarse a sí mismo - la teshuvá: el retorno-, la que nos abre la mirada hacia el otro – tzedaká: la justicia social- , y la que nos lleva a mirar más allá - la tefilá: la plegaria.

El proceso al que tanto chicos como grandes somos convocados a atravesar en los días de Iamim Noraim nos enseña que para encarar la difícil y hasta utópica tarea de mejorar el mundo, tenemos que empezar por mejorarnos a nosotros mismos. Esta superación personal o tikún atzmí- corregirnos y mejorarnos a nosotros mismos-, nos llevará a relacionarnos mejor con los demás y, en definitiva, al beneficio general, al tikún olam -mejoramiento del mundo. En referencia a nuestro entorno y al mundo que nos rodea, en la actualidad tenemos una mirada de mayor respeto y cuidado por el planeta Tierra. Esta actitud se manifiesta también a través de los movimientos ecológicos cuyos ideales están presentes en ámbitos como la política y la educación.

 

La secuencia didáctica que hoy les presentamos nos conduce a atravesar los tres niveles de mejoramiento personal que expresamos en la tefilá de Unetané tokef y de este modo, acompañar a nuestros alumnos en su paso de la niñez a la adolescencia y enfrentarse al desafío que implica madurar.

En la preadolescencia y en la adolescencia, el crecimiento que vivencia cada uno de  los chicos individualmente se da dentro de un grupo de pertenencia. Amigos del alma, mejores amigos, javerim, como se dice tan significativamente en ivrit. El Unetané tokef los debe enfrentar a los compañeros que tienen a su lado y con los que mantienen una relación ética sobre la que deben reflexionar. Claro que también su familia e incluso marcos más amplios, como la comunidad o la sociedad en la que viven, pueden ser vistos por ellos como un otro más accesible.

 

Por tal motivo, hemos decidido centrarnos en el valor de la amistad, los verdaderos amigos y los compañeros cercanos (sabemos que no es lo mismo), para darles sentido a los contenidos de los días de Rosh Hashaná y Iom Kipur.  Este sentido, se puede ilustrar en el siguiente poema, que podemos compartir con los chicos:

¡Hay equipo!

Deborah Rosenberg

 

Cuando tengo ganas de sumarme,

cuando mis compañeros me invitan a sumarme,

cuando le doy el lugar a otro a que se sume,

cuando no le digo a nadie que queda afuera por perder un punto:

hay equipo.

 

Cuando entre varios tenemos un mismo objetivo,

cuando nos importa más lograr ese objetivo que quién lo  ha logrado,

cuando el objetivo que tenemos es bueno para todos.

Cuando llegamos a cumplirlo todos los que lo soñamos:

hay equipo.

 

Cuando nos damos cuenta de que hay más de un equipo,

cuando otro equipo no es un enemigo, sino un desafío,

cuando respetamos que cada equipo es diferente al otro,

cuando entre todos los equipos, también podemos decir:

hay equipo.

Objetivos generales:

 

Lograr que los talmidim:

  • Transiten el proceso de teshuvá desde su experiencia como preadolescentes y adolescentes en crecimiento, con las vivencias y emociones propias de la edad.

  • Profundicen en los contenidos y temas que hacen al periodo de Iamim Noraim que comienza el primer día del mes de Elul y culmina en Iom Kipur.

  • Incorporen y reflexionen sobre los valores que transmiten la festividad de Rosh Hashaná y el día de Iom Kipur.

  • Analicen y comprendan desde una perspectiva actual el sentido de tefilot que forman parte del Majzor.

  • Plasmen lo aprendido en una producción conjunta que implique un aporte significativo para su escuela, para su comunidad, para su familia y/o para ellos mismos.

 

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